Ahora, ¿cómo superamos el miedo? ¿Cómo rompemos nuestras limitaciones? La respuesta es sencilla: comenzamos a activar la valentía. Dice la Biblia que solamente los valientes arrebatan las bendiciones. Solamente los valientes vencen a sus enemigos. La Biblia cuenta historias de personas que con pocos recursos hicieron mucho porque Dios estaba con ellos. David era tan solo un adolescente y venció al gigante. El profeta Isaías era muy joven y fue llamado por Dios. Gedeón con un ejército de 300 hombres venció a miles de enemigos. Dios bendice a los valientes. Dios a los cristianos que solucionan problemas. Dios bendice a los que tienen ganas de ser bendecidos.
Posiblemente en el camino a la bendición nos vamos a cruzar con circunstancias o personas que querrán infundarnos miedo, pero tenemos que confiar en Dios y tener fe porque el único lenguaje que entiende Dios es la fe. El que es valiente es porque tiene fe. El pastor Bernardo Stamateas dice: “La fe te sirve para conectarte con Dios porque fe es su lenguaje. Cada vez que busques a Dios tenés que hacerlo con fe, creer que él te escucha y te responde. A Dios le agradan las personas que se acercan a él con fe. La fe tiene el poder de mover la mano de Dios: todo lo que le pidas creyendo él te lo dará, esta es su promesa. La fe es acción, movimiento, resultado, vida. La fe no es estática, a la fe no solo la usás cuando pedís, sino a cada momento. ¡Comenzá a levantarte con fe cada mañana y creé que lo mejor está por venir hacia tu vida!”.
Pongámonos en acción y Dios irá delante de nosotros abriéndonos camino…
Julio césar cháves escritor78@yahoo.com.ar
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