
Por boca del profeta Isaías Dios nos dice que él puede hacernos conocer el futuro si confiamos en él y en su palabra. Dios controla el reloj del destino de la humanidad y al mismo tiempo controla el destino del reloj del destino de cada individuo en particular. Dios tiene contados aún los cabellos de nuestra cabeza. La mano omnipotente de Dios se ocupa de nuestro futuro. Dios tiene el control. El mejor remedio para la incertidumbre y el miedo a la vida, es el conocimiento de que Dios se ocupa de nuestros asuntos y tiene pleno conocimiento de nuestro porvenir. Cada vez que nos preocupamos por el los secesos del futuro malgastamos nuestro presente. Pre-ocuparnos es ocuparnos antes de tiempo, es abrir el paraguas cuando el pronóstico del tiempo dice que no va a llover. Así que entreguémosle a Dios nuestra vida completamente porque él nos anuncia un futuro de bendición para nosotros y nuestros seres queridos. Lo único que nos pide a cambio es que confiemos en él y pongamos en práctica su palabra. Si lo buscamos a él nuestro presente será maravilloso y nuestro futuro será de bendición. Nuestras necesidades físicas, emocionales y espirituales serán suplidas por su inmenso poder. Nada nos faltará. En delicados pastos nos pastoreara. Habitaremos bajo sus alas. Con la compañía del Señor estaremos seguros y no tendremos miedo del porvenir. Jesús dijo: “…no os afanéis por vuestra vida”. (Mateo 6:25).
Julio césar cháves escritor78@yahoo.com.ar