El traicionero

Traicionar es renegar, sublevarse, conspirar. El traicionero es desleal, mentiroso. La traición se da cuando defraudamos a nuestra familia, los amigos, los compañeros de trabajo, etc. Cada vez que una persona dice algo o difunde datos, información o lo que sea contra otra persona, esta traicionando. Colaborar con gente que no tiene ética ni moral, es traicionar.

Traicionar, en definitiva, es una violación de la fidelidad debida. A menudo veo gente que habla mal de otros, que opinan, blasfeman, argumentan, teorizan sobre la vida ajena sin pudor o remordimiento, esas son personas traicioneras. La traición es una de las acciones más aterradoras. Destruye al traicionado y fomenta la agresión, la rabia, el rencor y el deseo de destrucción de nuestro semejante.

Al mismo tiempo trae aparejado dolor, pérdida de la confianza, disminución de la autoestima, sentimientos de minusvalía, impotencia, humillación, degradación, todo lo cual puede inducir a alguien a la depresión. Esto lo advertimos en las parejas que se rompen por infidelidad. El que fue víctima de la infidelidad queda destruido.

De la misma forma, aunque al principio el traicionero disfruta de la sensación del engaño, se convierte en presa del remordimiento y al igual que Judas quiero quitarse la vida. Cuando un hombre o una mujer engañan a su pareja, de primer momento pierden la relación y consecuentemente van perdiendo la reputación, cosechan mala fama y muchos enemigos. El traicionero es traicionado por su propia traición.

El escritor Brasileño Paulo Coelho dijo que “la traición es el golpe que no esperas”. Es decir, la traición se puede dar hasta cuando te dan un beso. Fíjate el caso de Judas. Traicionó a Jesús con un Beso. Lo malo de la traición es que si el traicionero resulta impune posiblemente vuelva a traicionar. Y cuando una persona va haciendo de la traición un hábito indefectiblemente terminará por traicionar a quienes más ama.

Generalmente el traicionero traiciona a alguien a quien se opone, pero cuando la traición esta dirigida a seres queridos es porque alguien se ha vuelto como Lucifer, dispuesto a todo con tal de estar por encima de las demás. Por algo será que el poeta español Antonio Machado dijo que “En el análisis psicológico de las grandes traiciones encontraréis siempre la mentecatez de Judas Iscariote”.

Julio césar cháves escritor78@yahoo.com.ar