sábado, 2 de febrero de 2008

Lo básico es lo básico


La persona inteligente aprovecha las oportunidades. Lo que motiva su accionar es el deseo de perfeccionarse. Sabe que para aprovechar las oportunidades debe estar preparado, capacitado. Por esto desarrolla permanentemente su capacidad de hacer esfuerzos continuados para conquistar sus objetivos. Cuando vienen las oportunidades también aparecen los miedos, la pereza, el pesimismo, el conformismo, pero el que sabe lo que quiere deja todo esto de lado y avanza hacia su destino.

Siempre observo y escucho a la gente que habla de proyectos, objetivos, planes, pero lo que hablan no sale del terreno de las palabras. Esta gente no hace nada por conseguir lo que quiere. Esperan que el éxito caiga del cielo, cuando en realidad uno debe buscarlo. Hay gente que hace años que va a escribir un libro y todavía ni escribió una sola frase. Hay gente que durante años ha hablado de poner un negocio y todavía sigue de empleados. Hay estudiantes que durante años han postergado rendir una materia el año entrante. Lo cierto es que en la vida nada es casualidad. Todo exige trabajo, disciplina, motivación, planeación, acciones inmediatas. Hay que aclarar que la superación personal muchas veces no esta relacionada con lo económico. Con frecuencia encontramos personas que tienen una buena posición económica y sin embargo, se sienten infelices.
La estabilidad emocional vale más que el dinero. El buen ánimo no se compra en el supermercado. La grandeza de espíritu no se regala sino que hay que estar dispuesto a enfrentar y resolver los problemas. Aunque los recursos económicos sean escasos, nuestro objetivo de superación personal no debe estar enfocado en lo que nos falta si no en lo que tenemos. Nuestro enfoque debe estar en mejorar nuestros puntos fuertes, en acumular conocimientos, incorporar nuevas experiencias, aprender cosas nuevas. Todo ayuda para bien. Todo suma. Si deseamos mejorarnos podemos empezar por lo básico. Poder comer todos los días a la misma hora. Dormir al menos ocho horas. Leer libros. Pasar tiempo con las personas que amamos. Dedicarles tiempo a nuestros amigos. Ser amables con los demás. Trabajar con entusiasmo. Ayudar al otro. Dar buenos consejos. Si sos estudiando estudia más. Si tenés novia hacele un regalo. Si sos casado lleva a cenar a tu esposa. Lo básico es lo básico. Si cuidas lo básico vas a disminuir errores, lograras mayor agilidad e inteligencia en tus relaciones interpersonales. Serás mejor persona. Te amaran más. Mejora tu vida.
Con mucha frecuencia lo gente fracasa porque descuida la pequeño, lo básico. Muchos quieren llegar al éxito sin pasar por el esfuerzo y el trabajo. La superación se encuentra en nosotros mismos. No depende del dinero y de los bienes que tengamos. Tampoco depende de la edad. Todas las personas somos capaces de llegar a donde queremos. Todos somos capaces de hacer realidad nuestros sueños. Si alguien lo logro nosotros también podemos lograrlo. Renunciar al entusiasmo confina nuestra vida a la tristeza, la falta de aspiraciones, en fin, nos confina al conformismo. Las posibilidades de mejorarnos a nosotros mismos son innumerables. Por supuesto que podemos cruzarnos con el desánimo, incluso podemos dejar algo sin terminar. Pero si cuidamos lo básico, entonces todo saldrá bien.

Julio césar cháves
escritor78@yahoo.com.ar

No hay comentarios.: