El conocimiento es indispensable. Poseer conocimiento bíblicos concretos, nos permite reaccionar inteligentemente ante los momentos difíciles e inevitables de la vida. Conocer la Biblia nos brinda modos alternativos de acceder a la realidad, siempre teniendo en cuenta que Dios está con nosotros en todo momento de la vida. El conocimiento bíblico es el basamento sobre el que se asienta la formación de un verdadero y sólido cristiano. La Biblia es la base de la fe, la fuente de la sabiduría y la carta magna de la libertad. Sus principios orientan, rectifican lo torcido, clarifican lo oscuro y echa luz sobre lo que está en tinieblas. El apóstol Pablo nos dice respecto a la Biblia: “Toda la escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra”. (2 Timoteo 3:16,17). La Biblia nos dice de dónde venimos, porqué estamos aquí, y hacia dónde vamos.
La tarea más difícil, la de tener paz y la de ser feliz, requiere un conocimiento profundo de la palabra de Dios, buen conocimiento de la voluntad de Dios que está descripta en la Biblia, nos permite vivir en armonía con Dios, principalmente, con nosotros mismos y con nuestros semejantes. Una persona que no ha leído la Biblia no puede considerarse culta, pues la Biblia, es el libro por excelencia, que forma personas libres y completas. Hoy día vivimos en un mundo-mercado donde todo es competencia. Debido a esto es importante conocer lo que piensa Dios, para no caer como las masas en un comportamiento diabólicamente competitivo, y destructivo hacia el prójimo. Conocer lo que Dios dice en la Biblia, nos permite ser un piloto capaz de navegar en medio de las incertidumbres y de las situaciones negativas de la vida, para caminar en pos de la voluntad de Dios. Mateo 25:35 dice: “Cielo y tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán”.
El Dr. Billy Graham escribió al referirse a la Biblia: “En la tapa de tu Biblia y la mía, aparece la inscripción: ’Santa Biblia’. ¿Sabes por qué la Biblia es llamada santa? ¿Por qué recibe ese nombre cuando en sus páginas figuran tantos relatos de lujuria, codicia y guerra? Te diré el porqué. Es porque la Biblia dice la verdad acerca de Dios, del hombre y del diablo. La Biblia enseña, por ejemplo, que debemos aceptar la verdad de Dios en lugar de aceptar las mentiras del diablo acerca del sexo, de las drogas, del alcohol y de la hipocresía religiosa. Jesucristo es la verdad última y final. Además, él dijo la verdad. Y nos dijo que como él es la verdad, nos haría libres”.
El mundo actual está empapado de caos. Podríamos decir que vivimos en una especie de ‘CAOSMOS’, un caos destructivo y a la vez organizado. Conocer la palabra de Dios nos provee una formación y educación (Educar quiere decir formar) completa y diversificada. Umberto Eco, prestigioso escritor italiano, respecto a la adquisición de conocimiento dijo: “Tengo curiosidad, necesidad de conocimiento. Necesidad de ampliar mi propia vida, que es tan breve. Porque, a través del conocimiento, al morir se pueden haber vivido miles de vidas. Uno tiene la experiencia propia pero, con sólo quererlo, puede acercarse a la de Napoleón, a la de Julio César”. Eco dice que es muy importante la adquisición de conocimiento humano. Esto es bueno. Es necesario. Pero mucho más necesario es el conocimiento de la Biblia. Finalmente, el Dr. John Hagee nos cuenta cómo debemos hacer para vivir una vida victoriosa: “La clave para una vida cristiana victoriosa es no perder de vista lo eterno. Mirar más allá del tiempo. Vea más allá de la carga que lleva. Manténgase arraizado en las Escrituras. Obre su salvación como dice la Biblia ‘con temor y temblor’. ¡La Biblia es la carta magna de la libertad!
Julio C. Cháves. Escritor78@yahoo.com.ar
La tarea más difícil, la de tener paz y la de ser feliz, requiere un conocimiento profundo de la palabra de Dios, buen conocimiento de la voluntad de Dios que está descripta en la Biblia, nos permite vivir en armonía con Dios, principalmente, con nosotros mismos y con nuestros semejantes. Una persona que no ha leído la Biblia no puede considerarse culta, pues la Biblia, es el libro por excelencia, que forma personas libres y completas. Hoy día vivimos en un mundo-mercado donde todo es competencia. Debido a esto es importante conocer lo que piensa Dios, para no caer como las masas en un comportamiento diabólicamente competitivo, y destructivo hacia el prójimo. Conocer lo que Dios dice en la Biblia, nos permite ser un piloto capaz de navegar en medio de las incertidumbres y de las situaciones negativas de la vida, para caminar en pos de la voluntad de Dios. Mateo 25:35 dice: “Cielo y tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán”.
El Dr. Billy Graham escribió al referirse a la Biblia: “En la tapa de tu Biblia y la mía, aparece la inscripción: ’Santa Biblia’. ¿Sabes por qué la Biblia es llamada santa? ¿Por qué recibe ese nombre cuando en sus páginas figuran tantos relatos de lujuria, codicia y guerra? Te diré el porqué. Es porque la Biblia dice la verdad acerca de Dios, del hombre y del diablo. La Biblia enseña, por ejemplo, que debemos aceptar la verdad de Dios en lugar de aceptar las mentiras del diablo acerca del sexo, de las drogas, del alcohol y de la hipocresía religiosa. Jesucristo es la verdad última y final. Además, él dijo la verdad. Y nos dijo que como él es la verdad, nos haría libres”.
El mundo actual está empapado de caos. Podríamos decir que vivimos en una especie de ‘CAOSMOS’, un caos destructivo y a la vez organizado. Conocer la palabra de Dios nos provee una formación y educación (Educar quiere decir formar) completa y diversificada. Umberto Eco, prestigioso escritor italiano, respecto a la adquisición de conocimiento dijo: “Tengo curiosidad, necesidad de conocimiento. Necesidad de ampliar mi propia vida, que es tan breve. Porque, a través del conocimiento, al morir se pueden haber vivido miles de vidas. Uno tiene la experiencia propia pero, con sólo quererlo, puede acercarse a la de Napoleón, a la de Julio César”. Eco dice que es muy importante la adquisición de conocimiento humano. Esto es bueno. Es necesario. Pero mucho más necesario es el conocimiento de la Biblia. Finalmente, el Dr. John Hagee nos cuenta cómo debemos hacer para vivir una vida victoriosa: “La clave para una vida cristiana victoriosa es no perder de vista lo eterno. Mirar más allá del tiempo. Vea más allá de la carga que lleva. Manténgase arraizado en las Escrituras. Obre su salvación como dice la Biblia ‘con temor y temblor’. ¡La Biblia es la carta magna de la libertad!
Julio C. Cháves. Escritor78@yahoo.com.ar
No hay comentarios.:
Publicar un comentario