El lenguaje del cuerpo.

Así como podemos hablar con nuestra boca mediante la utilización de palabras también podemos hablar a través del lenguaje de nuestro cuerpo. La comunicación humana se efectúa con palabras pero se efectúa más mediante posturas, posiciones, gestos, etc. Un gesto muchas veces dice mucho más que cientos de palabras. El lenguaje de nuestro cuerpo es tan relevante como nuestro lenguaje oral, quizás más importante. Charles Chaplin y muchos actores del cine mudo fueron pioneros en el arte de la comunicación no verbal, ya que en aquel entonces, era la única forma de comunicarse con los cinéfilos. Un actor debía utilizar muy pero muy bien su lenguaje corporal. Sus gestos y otras expresiones o señales físicas, debían transmitir y comunicar de modo eficiente, eficaz, asertivo y coherente el contenido de la trama del film.
Después de un par de décadas, cuando se le agregó sonido al cine, se popularizaron las películas habladas y los aspectos se destacaron por sobre el lenguaje no verbal, de modo tal, que muchos de los más famosos y talentos actores de la época desaparecieron y surgieron otros que tenían buena y fluida técnica oral. Muchos investigadores de la comunicación humana, coinciden en que el canal verbal se utiliza principalmente para proporcionar información, mientras que el lenguaje corporal es empleado para expresar actitudes, y en ciertos casos reemplaza al lenguaje verbal. Aunque en el cine el lenguaje corporal no es tan importante como en épocas del cine mudo, vale decir que el lenguaje de nuestro cuerpo es de suma importancia en las relaciones interpersonales y en las relaciones públicas.
En lo que refiere al estudio técnico del lenguaje del cuerpo, el trabajo realizado antes del siglo XX que más resonancia tiene es el de Charles Darwin, La expresión y la emociones en el hombre y los animales, publicado en 1872. Este fue el libro que dio el puntapié inicial de prolíficos estudios modernos sobre las expresiones faciales y múltiples expresiones corporales. Estas observaciones e ideas de Darwin han sido convalidadas por los científicos modernos de todo el mundo. Gracias a estas investigaciones científicas se arguye y comprueba que el lenguaje del cuerpo es de suma importancia en las relaciones entre los seres humanos. Describir los gestos existentes no es posible en este breve espacio pero si se puede decir que existen buenas y malas expresiones corporales. Con sentido común advertimos cueles pueden ser las características de determinados individuos mediante el análisis y la observación de sus expresiones físicas y faciales. A la hora de relacionarnos con los demás hay que ser conscientes de lo que se transmite mediante el lenguaje del cuerpo. Hace poco leí un libro a este respecto que me gustaría recomendarles a modo de conclusión. La obra se llama El lenguaje del cuerpo y el autor es Allan Pease. Es interesante pues el autor estudió durante más de 10 años el fenómeno de la comunicación sin palabras, aunando aportes de la ciencia de la conducta individual y social. Leerlo me ayudo a apreciar asertivamente el lenguaje corporal de los demás y el mío propio. Pease nos dice: “Este libro no es la última palabra en lenguaje corporal no contiene ninguna de las fórmulas mágicas que prometen algunos libros. El propósito de El lenguaje del cuerpo es hacer al lector más consciente de sus propias señales no verbales y demostrarle cómo las personas se comunican sin hablar”.


Julio César Cháves escritor78@yahoo.com.ar