
Hay que romper la antigua manera de pensar, romper con los viejos hábitos que nos han mantenido en la pobreza y en la mediocridad, hay que encontrar la voz interior que nos inspira a fortalecer nuestras capacidades, inspirando a otros para que ellos también encuentren su propósito en la vida. En el mundo hay herramientas suficientes para desarrollar nuestras habilidades. “Para descubrir nuestra voz, debemos identificar nuestros dones de nacimiento. Estos son: la libertad de elegir, los principios y las cuatro inteligencias (física, mental, emocional y espiritual). Una vez identificada esa voz, debemos expresarla. La voz se manifiesta mediante la visión (proyectos), la disciplina (pagar el precio), la pasión (impulso que sostiene la disciplina) y la conciencia (sentido de lo que es bueno)”.
Covey señala en su libro que estamos en la era del conocimiento y nos indica que el conocimiento y la información es lo único que responde a las necesidades actuales. “La nueva economía se basa en el trabajo del conocimiento. La riqueza ha emigrado del dinero y las cosas a la gente, al capital intelectual y social. Se hace necesario utilizar un paradigma de liderazgo diferente dentro de las organizaciones. El líder debe inspirar a los demás. De acuerdo con Covey, los cuatro roles del liderazgo son: modelar, encontrar caminos, el alineamiento y el facultamiento. El trabajador del conocimiento de la actualidad piensa en términos de transformación y no solo en términos de transacción. El Octavo Habito es en síntesis, encontrar una voz propia e inspirar a los demás a encontrar la suya. El utilizar nuestras voces con sabiduría para servir a los demás nos conducirá hasta la siguiente era de la voz humana, la era de la sabiduría”.
"Un pájaro necesita de sus dos alas para volar. Un individuo necesita hacer uso de sus dos hemisferios cerebrales para tener éxito en la vida."
Dr. Lair Ribeiro
Julio césar cháves escritor78@yahoo.com.ar