martes, 5 de abril de 2011

Discriminados y estigmatizados

Homosexuales y petisos, gordos y pelados, enfermos de sida y pobres, los deformes y tartamudos, todos estos tipos de individuos son discriminados y estigmatizados por miembros de la sociedad. De alguna u otra manera, “Todos” participamos activamente en este tipo de violencia psicológica llamada estigmatización. El término estigma lo crearon los griegos con el fin de referirse a cortes o quemaduras en el cuerpo y decían que el portador de tales señales físicas era un esclavo, un criminal o un traidor. Después de unos siglos, durante el cristianismo, se agregaron significados que hacían alusión a signos corporales impartidos por la divinidad. En nuestra época el término estigma es utilizado por los especialistas en socio-psicología con el objeto de referirse a los individuos inhabilitados para una plena aceptación social. Debido a esta tendencia estigmatizante que no acepta al diferente muchos quedan fuera de lugar, fuera del mundo, y son marcados como ganado que nos condenan a la marginación, la exclusión y la indiferencia de los demás. Por causa de la estigmatización social surgen las segregaciones sociales, las cuales son estimuladas por los defectos preconcebidos que los sujetos estigmatizantes encuentran en sus semejantes. El mundo no está en peligro por las malas personas sino por aquellas que permiten la maldad, dijoAlbert Einstein Erving Goffman, investigador de la Universidad de California en Berkeley, en su ensayo sociológico titulado Estigma, establece que hay tres tipos de estigmas: primero se encuentran los de origen físico, que son los representados por alguna deformidad o cierta discapacidad física; en segundo lugar se sitúan los de carácter que son aquellos que evidencian una personalidad débil y excesivamente vulnerables a determinadas variables del entorno, por ejemplo, el arrebato, la ira, la violencia, la depresión; y en tercer y último lugar están los estigmas tribales, que son los que dan cuenta del grupo al que pertenecen los sujetos, verbigracia la clase social, la religión, la etnia, sexo, raza. Con adjetivos calificativos peyorativos se estigmatiza, gestando apodos o seudónimos violentos y destructivos. Parece ser que el estigma como símbolo cultural tiende a estigmatizar y descalificar el diferente, por motivo de cualquier fruslería, aún sin conocer la idiosincrasia y personalidad del otro. Se racionaliza lo irracional y ello norma criterios de diferenciación para eliminar la presencia del que es considerado adversario por el mero hecho de tener características físicas o de carácter que salen fuera del común de la gente. Una forma de interactuar de las personas es a través de símbolos, signos o imágenes que implican significados que son interpretados por los sujetos estigmatizantes-estigmatizados. Con esta condicionante estigmatizante, la sociedad reproduce su cruel vigor y realiza cambios en su estructura social donde existen los incluidos y excluidos, los normales y los diferentes, los sanos y deformes, los gordos y flacos, los lindos y feos. Indudablemente el estigma es una forma de violencia y discriminación, y tomar conciencia de su poder destructor nos permite conocer en carne propia el filo cortante de nuestra maldad. El mal está sólo en tu mente y no en lo externo. La mente pura siempre ve solamente lo bueno en cada cosa, pero la mala se encarga de inventar el mal, afirmóJohann Wolfgang Goethe. Julio César Cháves escritor78@yahoo.com.ar www.juliochaves.blogspot.com

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